la muerte posee tentáculos
que destruyen los huesos del oído
tentáculos que le permiten indagar en los ojos
y extraer como si fuera astillas
la memoria de un barranco y sus innumerables insectos
la muerte colecciona nervios y arterias
con los que construye desde hace tanto tiempo
una réplica de adán
que destruyen los huesos del oído
tentáculos que le permiten indagar en los ojos
y extraer como si fuera astillas
la memoria de un barranco y sus innumerables insectos
la muerte colecciona nervios y arterias
con los que construye desde hace tanto tiempo
una réplica de adán
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